jueves, 8 de marzo de 2012

Conservar en el desarrollo

El gobierno colombiano tiene un proyecto de ley de Tierras y Desarrollo Rural que convocó a un grupo de personas* vinculadas a la conservación de ecosistemas naturales a compartir lo que consideramos debe incluir la nueva reglamentación.


Nos encontramos en la Reserva Bosque de la Candelaria, donde se generó la reflexión sobre la importancia de lo ambiental como eje transversal en lo que construyamos como desarrollo rural.
Partimos de fichas en blanco para escribir individualmente lo que consideramos fundamental, en orden de prioridades, hasta establecer y definir los puntos comunes. 
 


 El desarrollo rural es sostenible y por ello lo definimos como el que se realiza en un lugar geográfico específico y con sus propias condiciones naturales, parte de un escenario mundial de cambio climático y en razón de ello a de garantizar, en lo social, la seguridad alimentaria y el bienestar de las personas, para asegurar la integridad de los ecosistemas naturales y un acceso ventajoso y competitivo a mercados.

El proyecto de ley requiere incorporar los siguientes aspectos:

  


Promoción y fortalecimiento de procesos sociales: Fortalecer el desarrollo de iniciativas sociales para el empoderamiento, la participación y el legado de los procesos de conservación-producción sostenible. 
Manejo adecuado de fuentes hídricas: Asegurar que el desarrollo rural garantice la conservación y uso sostenible del recurso hídrico (aguas superficiales y subterráneas). 
Desarrollar conservando: El desarrollo rural requiere articular los procesos de producción con la conservación de los ecosistemas y recursos naturales.
Proyectos productivos sostenibles: El desarrollo rural debe estar fundamentado en el fomento y realización de prácticas y proyectos ambientalmente sostenibles, que tengan como resultado un valor agregado en los productos finales, como reconocimiento a los procesos que han incluido acciones de conservación en las diferentes etapas del proceso. 
Instrumentos económicos para la conservación-producción: Promover mediante señales de mercado(tasas por uso de agua, pago por servicios ambientales, créditos, subsidios, compensaciones...) la producción sostenible y la conservación, reconociendo los beneficios ambientales que generan.
Acceso y equidad a la tenencia de la tierra: La formalización y distribución equitativa de la tierra, asociada a un uso que garantice la función social y ecológica de la propiedad, es condición primordial para el desarrollo rural sostenible. 
Soberanía y seguridad alimentaria: Fomentar en los territorios rurales la producción sostenible de alimentos, diversificada y de calidad, acorde con las características agroecosistémicas y culturales de cada región, así como los medios para el acceso equitativo y permanente de los mismos. 
Ordenamiento del suelo en todos los niveles territoriales: la planificación ordenada del suelo para la producción sostenible debe incorporar condiciones socioambientales y ecosistémicas y garantizar la protección de áreas de especial importancia ecológica. 
Adaptación y mitigación al cambio climático: Propender porque las aciones que se desarollen en los territorios rurales, incluyan actividades para disminuir las causas del calentamiento global y reducir los impactos de ese fenómeno sobre las poblaciones y procesos de producción, así mismo como aprovechar las oportunidades de oferta de servicios ambientales globales. 
Generación de bienes y servicios ambientales: Asegurar que los procesos que se desarrollan en el territorio rural aporten a la generación, mantenimiento, provisión y valoración de los servicios ambientales. 
Generación de capacidades para la producción sostenible: Propender por la recuperación,  generación, innovación, difusión y apropiación de conocimientos y tecnologías sostenibles acordes a la diversidad ecológica, cultural y económica de los entornos rurales.
Infraestructura para la integración rural: Promover la planificación y desarrollo de infraestructura y medios con consideraciones ambientales que permitan el acceso a los mercados de los productos generados en los modelos de conservación-producción.
*Ana María Fuentes–PNN, Ana María Lora, hizo la relatoría, -WWF, Cesar Marulanda-RSC, Claudia Durana–RSC, Consuelo Bonilla-RSC, Gloria Umaña-RSC, María Teresa Palacios, facilitó el proceso-WWF y Martha Morales-RSC.

1 comentario:

kiki dijo...

Os deseo un buen fin para vuestras premisas generales.

Importante la premisa de los recursos hídricos e interesante la premisa de la seguridad alimentaria. A mi me apasiona todo lo relacionado con la trazabilidad de los alimentos, aunque pienso que el usuario final tiene poca información al respecto.

También deseo que la nueva ley y el reglamento que se derive de la ley que se apruebe sea adecuado. Para mi un reglamento adecuado para la implementación de una ley es tan importante como la propia ley.

Siempre admirando vuestra energía para conseguir una mejora del medioambiente.

Saludos