A los camarones crudos le añado sal, panela pulverizada y vinagre de manzana en partes iguales. Los tapo y dejo marinar por doce horas. Luego los escurro y los pongo en una sartén previamente caliente a que cambien de color por las dos caras. Los paso a una rejilla y los pongo en el horno solar, controlando la temperatura para que no pase de los 100 grados centígrados. También pueden ponerse en un horno convencional por dos horas y a una temperatura de 85 grados centígrados. Una vez están deshidratados los dejo enfriar y los envaso en un frasco esterilizado, lis etiqueto y almaceno en un lugar seco y oscuro.
Hecha en tela de algodón y decorada con un bordado sin patrón, en el que utilicé los puntos: nudo francés, trenzado, festón u ojal, rococó, margarita, pata de cabra y palestrina. Tejí las asas a crochet con hilo de algodón.
Para aumentar la densidad de las áreas del bosque reforestado iniciamos pequeñas siembras. En esta oportunidad se plantaron dos laureles de cera (Morella pubescens) y un espino (Duranta mutisii).
